Recuerdo de chica aquella serie ochentera en la que un grupo
de tipos variopintos donde los hubiera formaban el equipo perfecto. El
inteligente, el gracioso, el forzudo… Al final siempre ganaban a los malos y
salvaban a los buenos. Eran el quipo perfecto! Eran el equipo A!
Pues resulta que yo también tengo a mi particular Equipo A.
Pero este es más completo, más Atractivo y más Apetecible que el de M.A. EL mío
es el equipo Activo, Animado, Arriesgado… Al principio he de reconocer que
tenía mis reservas, no en cuanto a ellos porque apenas les conocía, sino en
cuanto al conjunto. Ocho adolescentes embarcados en un proyecto como este
podrían salir por cualquier lado. Si bien es cierto que en el fondo sentía una
calma que me daba seguridad, cómo decir… un presentimiento. A día de hoy me he
confirmado en que la mezcla no había podido resultar más acertada. Y me apetece
que los conozcas. Porque todo este trabajo anónimo que estamos haciendo durante
este mes resulta que no es tan anónimo, resulta que tiene cara, tiene alma,
tiene sueños y deseos. Si te apetece los compartimos…
MARTA: Tiene 18 años y va camino de ser una de las médicos
más tiernas y entrañables que llegues a conocer jamás. Esos ojazos azules
transmiten por encima de todo ternura e ingenuidad. Marta es dulce, está
siempre dispuesta para todos y te derrite con una sonrisa. Antes de venir no
tenía claro a lo que se iba a enfrentar; sabía que iba a ser algo distinto y
que le iba a impactar cuando menos pero también era algo que quería hacer desde
hace mucho tiempo. Cuando le pregunto qué cómo se siente a día de hoy se pone
seria, pierde la mirada en el horizonte y dice con voz pausada “ algo así no se
puede contar, hay que vivirlo. Te metes de lleno en una cultura absolutamente
diferente a la tuya y me hace feliz poder conocer más cosas más allá de lo que
ya conocía” En cuanto a lo que ha aprendido hasta ahora también lo tiene
clarísimo y me dice que se ha dado cuenta de que “existen formas de vida
diferentes a la nuestra, ni mejores ni peores, sólo diferentes y me resulta
increíble que esta gente que no tiene tan fácil como nosotros el acceso a
tantas facilidades sean capaces de transmitir a la vez tanta alegría y tantas
ganas de vivir”
CLAUDIA tiene también 18 años, es una rubia menuda que
aspira a ser diseñadora industrial y con vocecita aparentemente frágil que
encierra a una mujer creativa donde las haya y con un respeto por los otros y
una educación tan exquisita que sorprende en su edad tanta madurez. Claudia no
se había planteado ninguna expectativa pero sí pensaba que iba a trabajar con
niños pequeños, sólo eso fue lo único que le chocó un poco al principio, el
tiempo justo para subirse al carro del ritmo de esta casa, que no fueron más
que las primeras horas después de llegar. Después de casi un mes aquí reconoce
estar encantada con la forma de vida que está experimentando y no duda en
responder que “el aprendizaje más fuerte que he adquirido hasta ahora es el de
que lo cotidiano es un tesoro aquí; lo que para nosotros es algo normal a
diario aquí no existe y de hacerlo sería de un valor incalculable” Clau está
aprendiendo además a tener paciencia, o mejor dicho a trabajarla… LA
convivencia con personas tan diferentes es difícil por momentos, el hecho de
hacer cosas que en un momento dado no te apetecen también. Yo, qué quieren que
les diga, creo que ella lo está bordando!
PAULA también tiene 18 años y tiene claro que su vocación
pasa por la Medicina, será sin dudarlo una increíble bioquímica dentro de unos
años. Paula tiene ese punto de reposo que admiro tanto en las personas. Sabe
bromear y hablar en serio, cada cosa en su momento. Trabaja como nadie y
siempre tiene una palabra cariñosa para todos (excepto para mí porque se empeña
en recordarme a diario que soy “una vieja”) Paula esperaba que la adaptación
resultase más difícil y en este momento no le tiembla lo más mínimo la voz
cuando asegura que se quedaría aquí un mes más por lo menos, sin dudarlo ni
medio segundo. Pau ha aprendido que “la convivencia es una de las cosas más
enriquecedoras que hay en la vida” y yo no dudo lo más mínimo que para ella sea
así porque se pasa el día observando, es prudente y no habla si no lo considera
oportuno; pero observa, escucha y aprende. Me gusta mucho su carácter, es una
pausa para todos los que vivimos con ella. Es una suerte que esté aquí.
JONATHAN tiene 18 años y una cara de chiquillo bueno que
hace honor realmente a cómo es. Johny quiere ser maestro, es noblote, generoso
y siempre, absolutamente siempre sonríe. No necesita hacer aspavientos para
resultar agradable a los demás y jamás le he oído decir que no a algo que
alguien le pida. El pobre ha tenido muy mala pata, literalmente, y desde hace
una semana arrastra un esguince tras un partido de fútbol España-Camerún aunque
lo lleva con una elegancia y un aplomo dignos de mención. Es hombre de pocas palabras pero tenía claro antes de venir que iba a hacer
amigos y a conocer una cultura diferente y efectivamente “he hecho amigos, he
conocido una cultura diferente… estoy a gusto! Y por el momento no me apetece
mucho volver a casa” Ha aprendido, entre otras cosas, que el idioma no supone
una barrera si así lo deseas.
MIGUEL es un futuro médico de 18 años, quizás una de las
personas que más me ha sorprendido desde que estamos aquí. En casa lo veía de
pocas palabras, muy prudente y más serio de lo que en realidad es. Aquí le he
descubierto como un hombre maravilloso, generoso, divertidísimo, trabajador
como el que más (aspecto que también han recalcado nuestros amigos africanos) y
no sólo porque trabaje bien sino porque siempre siempre lo hace con una sonrisa
y eso es admirable, realmente admirable en alguien tan joven, además. Miguel es
un absoluto caballero, cordial y de una educación exquisita. Me hace gracia que
con lo alto y grandote que es siempre me mira con cara de niño chico y me pide
consejo para las cosas más sencillas… Es un verdadero amor! Miguel no había
previsto nada sobre su experiencia africana “Me voy a lo que salga!” decía.
Pero una vez aquí y tras llevarse una impresión fantástica de los voluntarios africanos
te deja de piedra cuando te suelta que su mejor aprendizaje hasta la fecha es
que “he aprendido a ser más humano. A que la ayuda por poca que sea siempre es
bien recibida” A mí me encanta observarlo y darme cuenta un día y otro del
respeto y el cariño con el que trata a todo el mundo y de lo válido que puede
llegar a ser en cualquier ámbito, no en vano lo han apodado con el sobrenombre
de “SúerMigüel –aquí cuesta pronunciar la gue-“ y con el de “navaja de
Albacete” porque este niño sirve pa tó!
CARLOS tiene 18 años, quiere estudiar INEF, lleva a los Scouts “en vena” y se le
ilumina la cara cuando habla de su familia, sobre todo de sus padres. Carlos
siempre tiene una palabra, siempre, pero siempre siempre. No calla ni debajo
del agua!!! Pero también es verdad que siempre tiene una sonrisa. Pasa el día
inventando e ideando risas con su amigo Jaime pero luego se desvive por ser
amable y generoso con todos. Él tenía claro desde antes que venía aquí a echar
una mano, a aprender y por su puesto a disfrutar. He de reconocer que me dejó
la piel de gallina cuando me soltó de sopetón que esta estaba resultando “la
experiencia más reconfortante de mi vida” y que eso lo diga un chico que no
para, que está haciendo mil cosas a la vez continuamente… uff! Según él ha
aprendido por encima de todo “que donde caben 2 caben 20” y si no que se lo
digan a los conductores de los coches donde nos vemos cada fin de semana!!
JAIME tiene 17 años y se debate entre su vocación de maestro
y su amor por los animales; sueña, desea y estoy segura de que lo conseguirá
ser educador de animales en el Loro Parque.
Jaime tiene una personalidad curiosa, cuando no le conoces bien parece
más tímido, escondido tras su sonrisa socarrona y sus bromas a dúo con Carlos,
pero en cuanto escarbas un poquito encuentras una personalidad reflexiva,
madura, a quien se le cae la baba también hablando de su familia, de su gente.
Trabaja bien, es disciplinado en lo que hace y siempre tiene un guiño para que
el trabajo sea un poco más ameno y no caiga en la apatía. Antes de venir no
tenía expectativas creadas, sólo que venía a echar una mano y a disfrutar del
hecho de conocer una realidad nueva. Pero hoy me dice que lo que está viviendo
aquí supera a todo lo que se podía
imaginar en un principio; que esto es “3000 veces mejor de lo que habría podido
imaginar” Le ha sorprendido la gente, tanto los que nos han recibido como el
grupo que hemos venido desde casa, que ha superado sus expectativas también
porque nunca pensó que “pudiera sentirme como si estuviese con mi propia
familia” No duda un segundo en afirmar rotundo que ha aprendido que podemos ser
muy felices con muchísimas menos cosas de las que tenemos”
SUSANA tiene 17 años y la sonrisa más bonita de este lado
del mundo. Será la enfermera más dispuesta que conozcas, sin dudarlo! Susi es
curiosa, pregunta todo con interés y es noble, muy noble, su sonrisa es
terapéutica y cautiva a todo el que está cerca de ella. Es puro cariño y de
repente te lanza unas reflexiones sobre las cosas que está viviendo que te
dejan con la boca abierta. Le gusta hacer bien las cosas. Y las hace muy bien!
Susana dice que esperaba encontrarse con una situación de pobreza más acusada
al llegar aquí, de la misma manera jamás imaginó que los africanos fuesen tan
hospitalarios y que por tanto, le iba a resultar mucho más dura la adaptación.
En este momento Susi se alegra muchísimo de haber venido. Le está resultando
una experiencia increíble. Ahora que hemos conseguido el objetivo que
perseguíamos con el trabajo es consciente de que no sólo puede mejorar la vida
de otros sino de que su propia visión de la vida está cambiando a raíz de esto.
“Esto me está enseñando a valorar muchísimo lo que tengo” La rubia de oro es
una auténtica joya, a mí me encanta la forma que tiene de encajar las cosas
incluso cuando no son del todo de su agrado. Una mujer increíble, sí señor!
MAXI tiene 44 años y es el director de mi segunda casa... el sitio que más feliz me hace después de "villamor", mi Colegio. Hace años hizo una cooperación en Guinea Ecuatorial y desde hacía
tiempo le apetecía mucho repetir la experiencia de nuevo. Por otro lado
necesitaba romper de alguna manera la monotonía que le absorbe en su día a día
laboral y llevar adelante este proyecto, concretamente además, con este
grupo. Un par de veces en las últimas semanas le he escuchado decir “estoy
feliz” y he de reconocer que en ese momento se me escapa una sonrisa mirando a
otro lado. Me gusta cuando la gente confiesa su alegría. Me hace feliz también
a mí. Se encuentra relajado, está disfrutando casi como el que más y le ha
venido fenomenal la distancia y el separarse un poco del día a día. Ya sabes
que a veces, como me has oído repetir un millón de veces, sólo la perspectiva
es capaz de aliviarte el camino… Cuando le pregunto que qué ha aprendido se
enrala de una manera increíble y yo pienso que es maravilloso aprender y tener
tan claro que lo has hecho y además de tantas cosas juntas en tan poco tiempo; lo primero
que me dice es que “nunca puedes decir que ya lo has vivido todo; siempre se
puede vivir con ilusión y disfrutar del momento. Se puede ser muy feliz sin
tener tanto. Aunque lo que realmente me hace feliz del todo es haber podido
compartir esta experiencia con la gente joven; eso garantiza de antemano el que
haya muchos y muy buenos ratos”
En fin, este es mi equipo. No quería que acabara este
episodio sin habértelos presentado. Yo los he descubierto aquí y es aquí donde
quería que tú también los descubrieras un poquito más.
Cada uno tiene algo, una magia especial, un “algo” que hace
que sean muy especiales cada uno en un momento determinado. A veces da la
impresión de que alguien les eligió a posta para estar aquí.
Yo, desde luego, sólo puedo darles las gracias. Por hacer
que mi vida haya sido (sea, esté siendo) más cómoda, más divertida, más entretenida,
más interesante y más entrañable durante este mes de julio. Salvando todas las
distancias del mundo, han suplido de alguna manera a mis pequeños (que el tiempo va pesando y echarlos de menos se me está haciendo ya cuesta arriba). Me han
quitado el sueño cuando se han puesto malitos y se me ha caído un poco la baba
en nombre de sus padres cuando los he visto crecerse ante tanta cosa nueva; me
ha encantado redescubrir cómo se ve el mundo desde los dieciocho y comprobar
que, aunque mi cara cargue ya algunas arrugas, no me siento tan lejos como
temía.
Gracias de corazón por haber sido un verdadero equipo… y a
vivir lo que nos queda!
Yo creo que sois un motor de 10 cilindros, 10 corazones bombeando al mismo tiempo, ilusión, amor, solidaridad, amistad, convivencia... un motor imparable preparado para competir en el circuito más difícil que es la vida.
ResponderEliminarPero que es muy fácil cuando dispones de un buen motor, cuando conoces y te aprendes todas las curvas y los 10 estáis haciendo un increíble "Warm-up". Gracias
Es maravilloso saber q esos sentimientos ronden por la cabeza del equipo A al fin y al cabo ello han ido a dejar mucho pero vendrán con muchísimo más. Besitos para todos y mil abrazos...gracias Ana por acercarnos un poquito la magia de lo q están viviendo.
ResponderEliminarJE VOUS DIS MERCI
ResponderEliminarTRES BELLE EXPERIENCE AUSSI POUR NOUS
MAIS QUI EST ANA DORTA GARCIA ??? LES JEUNES SONT DEJA PRESENTE
QUENTIN TAGO KUE (TKQ)